¿Sabes cuál es la tarea principal a cumplir del adolescente? La membresía de grupo, es decir, pertenecer a un grupo de otros similares a él.
La pertenencia es una de las necesidades básicas del ser humano a lo largo de toda su vida, necesitamos ser parte de algo que es más grande que nosotros para:
Aprender de los otros.
Aportar a los otros.
Ser contenidos en el grupo.
Tener una identidad que en ese grupo se refleje.
Demostrar quienes somos.
En la etapa de la adolescencia, esta es la tarea principal a cubrir y si pones atención y/o recuerdas, el grupo, así sea pequeño o grande, tiene características que en algún momento deseaste tener o definitivamente te representa, el grupo proyecta parte de la identidad que en ese momento la persona está desarrollando. Es altamente probable que el adolescente que no pertenece a un grupo, esté dejando de cubrir una necesidad, pero además, frecuentemente tiene razones de fondo por las que no se integra.
Con la llegada de la pandemia y el confinamiento, los chicos han sido obligados a relacionarse a través de una pantalla a lo largo de 6 horas al día y lo hacen desde sus celulares. Se mandan memes, chistes, chismes y también, claro está, hacen lo que hacen dentro de la clase: platican entre ellos.
¿Es esto suficiente?
Si hablamos sobre las funciones que nos permiten relacionarnos con el mundo, forzosamente, hablamos de los sentidos. ¿Cómo puede un chico besar a una chica a través de la pantalla?, ¿cómo puede Jos probar el sándwich que hizo la mamá de Gus?, ¿cómo puede una chica sentir la mano del chavo que le gusta y al que por coincidencia ella también le gusta?, ¿dónde queda la función de relacionarnos a través de los sentidos cuando un mensaje toca tu mano, te manda un beso y te dice que te quiere con voz muda?
Ante esto, algunos chicos se han deprimido y se enfrentan a sentimientos y emociones como:
Tristeza
Soledad
Miedo
Frustración
Ansiedad
Algunos otros han experimentado dentro de su familia alguna pérdida y a estos sentimientos tendríamos que sumar el duelo.
Aun hay poca información sobre las consecuencias del COVID en los índices de suicidio en los adolescentes, sin embargo, las condiciones para que ellos se depriman, dada las baja posibilidad de relacionarse en forma personal con sus pares están dadas y la depresión, que es común en esa etapa, tiene altas probabilidades de escalar por lo que debemos estar atentos a estas 5 señales que de presentarse, lo recomendable es pedir ayuda profesional y estar cerca de ellos sin invadir:
Hablar abiertamente sobre el suicidio haciendo afirmaciones como “quisiera estar muerto”, “sería mejor morirme”, “la vida no tiene sentido”
Evitar contacto con sus pares, aunque en este momento, el encierro evita el contacto, este rubro se refiere a no contestar los mensajes que le envían, no participar en los juegos en línea en los que antes participaba
Cambiar su rutina. Ya sea en los alimentos o en las horas de sueño
Cambios en la personalidad como estar más ansioso de lo normal o muy irritable o aislarse por mucho tiempo
Autodestrucción como dañar su cuerpo o consumir drogas o alcohol
Los signos de alerta no siempre son evidentes y se pueden confundir en el contexto de la pandemia debido a la disminuida interacción entre los adolescentes haciendo más dificultoso detectar el riesgo.
Algunos tips para contener a los adolescentes en esta extraordinaria época:
La comunicación abierta y sin juicio siempre será de provecho para cualquier tema con el adolescente. Escucha más que hablar.
3 cucharadas de reconocimiento por 1 de amor.
Rol de obligaciones para cada uno de los miembros de la casa, la cooperación da sentido de pertenencia, hazlos parte de la familia y no de las visitas.
Establezcan metas a realizar en familia.
Repasen a diario lo que sí se logró.
Genera un “día de” en el cual jueguen o a alguien le toque hacer la cena para todos, o donde todos hagan la cena, de forma tal que se establezca una tradición en donde todos los miércoles, por decir un día, se sepa que en esa familia se hace algo especial y que alguien ese día es especial.
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